-¡¿Lo
has visto?! – pregunta parándose frente a mí.
-¿El
qué?
-¡Lo
que han preparado para el tercer Vasallaje de los Veinticinco! – exclama
exasperado, pasándose las manos por el pelo.
-No,
no lo he visto porque me da igual lo que pase. Los juegos terminaron para mí el
día que te traje de vuelta. – respondo cansada, llevandome la taza de té a los
labios.
-Te
aseguro que esto no te va a dar igual. – sigue.
-Finn... – acaricio su rostro con cariño, se ha
convertido en un hombre realmente guapo. - Tengo ochenta años y estoy enferma,
¿no crees que me toca descansar un poco?
-Este
año… los tributos serán escogidos de entre antiguos los vencedores.
La taza que sostengo entre mis viejas y
temblorosas manos cae sobre la mesa, salpicándonos a ambos con su ardiente
contenido. Miro a Finnick con el ceño fruncido y niego con la cabeza.
No puede ser… aunque no sé de qué me
extraño con todo lo que pasó en los últimos juegos. Katniss Everdeen, se
presentó voluntaria para salvar a su hermana pequeña, en un distrito en el que
nunca antes hubo voluntarios pues sabían que pocas eran sus posibilidades de
volver a casa con vida. Luchó y sufrió en la Arena, cambiaron las reglas sobre el
vencedor y en el último momento las volvieron a cambiar, obligándola a elegir
entre matar o morir a manos del chico de su distrito. Los trágicos amantes del
Distrito doce los llamaron. Pero la chica los desafió y eso no gustó a las
gentes del Capitolio… o más bien no gustó al presidente Snow. Y esta era su
forma de “recordar” que ni siquiera los vencedores son rivales para el poder
del Capitolio.
***
Hoy es la
cosecha y me obligo a arrastrarme hasta la plaza del pueblo con la ayuda del
bastón que Finnick me talló con madera, blanquecina por la sal, que encontró en
la playa. Al llegar al centro me coloco con los otros vencedores y en silencio,
escuchamos el trillado discurso que año tras año, el alcalde Sattherwaite da ante todo el distrito. El acompañante asignado
para este año, Ash, un tipo desgarbado y flacucho, da un pequeño y tartamudeante discurso y
procede a sacar los nombres de las urnas. Como siempre, las damas primero.
Agarra el papel y camina torpemente hasta el centro, carraspea.
Cierro los ojos con fuerza y contengo la respiración.
Cierro los ojos con fuerza y contengo la respiración.
Un grito histérico resuena en la plaza, mis ojos se abren bruscamente y la buscan hasta dar con ella. Tiembla como una hoja y su hermoso cabello castaño ondea al viento mientras se dirige al escenario. Casi sin percatarme, mis pies se ponen en marcha y la alcanzo antes de que ponga un pie en la escalera. Mi mano se aferra a su brazo y niego con la cabeza. Su rostro anegado de lágrimas me mira incrédulo y agradecido. La empujo para alejarla del escenario y con la ayuda de mi inseparable bastón empiezo a subir. Ash me espera arriba y me ofrece asiento, pero declino la oferta. No quiero dar pena a nadie, soy demasiado orgullosa. Con una sonrisa nerviosa el muchacho se gira y se dirige a la urna de los chicos, agarra un papel del fondo y tropezando dos veces con sus propios pies, se encamina de nuevo al centro.
- Fi-Fi-Finnick Od-Odair. ¡Finnick Odair!
Finnick sube al escenario
con la cabeza bien alta. Sus cabellos broncíneos brillan y lo hacen parecer un
dios surgido de entre las bravas aguas del mar que nos rodea. Se coloca a mi
lado y me agarra la mano y me la aprieta con fuerza, en señal de agradecimiento
por salvar a Annie de volver a la Arena. Le devuelvo el apretón y le acaricio
el dorso de la mano con el pulgar. Los Agentes de la Paz, nos guían hasta el Edificio de Justicia y nos
acompañan hasta unas habitaciones para que no podamos despedir de nuestras
familias. Cuando entro en la que me corresponde, me voy directa al sofá que hay
junto a la venta y me siento a esperar a que vuelvan para llevarme hasta el
tren. Cierro los ojos, esperando poder echar una cabezadita cuando unos suaves
golpeteos en la puerta, me hacen abrir los ojos al tiempo que esta se abre. Cierro
los ojos de nuevo y me los froto con fuerza porque creo que estoy soñando. Pero
no, cuando los abro de nuevo ella sigue allí. Mis ojos se llenan de lágrimas y
la veo acercarse a mí. Se sienta a mi lado y me abraza con fuerza. Mi niña, mi
preciosa niña está conmigo. Me separo un poco de ella y sostengo su cara entre
mis manos.
- No llores. – le digo,
secando sus lágrimas.
- Mamá. – dice abrazándome
de nuevo.
- ¿Cómo? – pregunto confusa.
- ¿Rose te lo dijo?
- Siempre lo he sabido.
- Mi niña… no sabes cuánto
lo siento. – beso sus cabellos y la aprieto contra mi pecho. – No tuve más
remedio.
La puerta vuelve a
abrirse, temo que vuelvan para llevarme y tener que separarme tan pronto de
Ona. Pero por la puerta aparecen River y Sirin. Mis ojos vuelven a llenarse de
lágrimas y los abrazo con fuerza, diciéndoles cuanto los quiero. Esta es mi
última oportunidad, así que les cuento todo.
- Siento que no pudiéramos estar
juntos, pero confió en que lo entendáis y que sepáis que aunque nunca estuve
cerca, siempre os cuidé y procuré que no os faltara nada. – les digo sujetándolos
fuertemente de las manos. – Me duele que ahora nos tengamos que separar de
nuevo y que esta vez sea para siempre. Pero agradezco mucho esta oportunidad.
Esta vez, cuando la
puerta se abre, sí que es el Agente de la Paz que me llevará hasta el tren.
- Se acabo la despedida. –
suelta cortante, agarrándome con fuerza del brazo.- ¡Vamos!
Me suelto de un tirón y
le lanzo una mirada envenenada.
- Tendrás que esperar unos
segundos más. – escupo, abrazando de nuevo a mi hija y mis nietos. – Os quiero muchísimo,
nunca lo olvidéis.- susurro. – Tú padre te quería más que a nada en el mundo,
tampoco olvides eso. – digo apretando a Ona una última vez contra mi pecho.
El Agente de la Paz, me
vuelve a agarrar del brazo fuertemente y soltándome de nuevo, me giro y lo
encaro.
- No me toques.
Caminando a trompicones,
seguida de cerca por aquel idiota, consigo llegar hasta el tren, donde Finnick
me ayuda a subir.
- ¿Cómo está Annie?
- Asustada, pero también aliviada.
– responde con tristeza. – No sabes cuánto te agradezco esto… aunque me duele
mucho verte en esta situación.
- Tengo ochenta años, he
vivido demasiado. – digo sentándome con cuidado en un cómodo sillón azul. –
Annie aun tiene muchas cosas que hacer.
Finnick se sienta a mis
pies y apoya la cabeza en mis piernas. Acaricio su cabello mientras miro distraídamente
por la ventana.
-Tenemos mucho trabajo por
delante.- murmuro. – Solo espero que todo salga bien.
Oh.Por.Mis.Angeles.
ResponderEliminar¡Drew, me he puesto a llorar! (¡Y no es una frase hecha! ¡Es literal!) Aiiiins que triste que me pone el capitulo, aunque la parte de Rose me ha matado mas que cualquier otra :_(
Aun asi estoy impaciente por ver el POV de Mags durante el vasallaje ¡Encima como escribes tu tata, nadie!
Muxus enormes y Petons de maduixa para parar un tren!
¿Me crees si te digo que yo también lloré mientras lo escribía?
EliminarA pesar de mi aspecto exterior soy súper sensible y llorona nivel máximo. Sí, ha sido muy triste, pero se merecían una despedida.
Yo también estoy impaciente por ponerme a ello, pero tengo que tomármelo con calma, porque quiero que sea perfecto. Tiene que quedar milimétrico con el de En llamas.
Muchas gracias por tu halagos, sabes que para mí tú también eres genial (aunque te tenga abandonada) Así que en cuanto termine con Mags, me centraré totalmente en tu blogs. Te voy a dar tanta guerra, que acabaras cansándote de mí y mandándome a tomar un “relaxing cup of café con leche in Plaça Catalunya” <- Me queda más cerca que la Plaza Mayor de Madrid. xD
¡MIL petons de maduixa/Marrubizko muxuak!
Dios,drew...
ResponderEliminarpor donde empezar...
Hace tiempo que perdi la esperanza de que subieras un nuevo cap, hoy me he pasado por casualidad por aqui porque estaba melancolica y me acorde de los chorra-comentarios numerados que nos escribiamos(esa yo de 14 años petarda y con aires de madura, como te podia caer bien?supongo que internet engaña xD y pensar que ya tengo casi 17...*se siente orgullosa de ser mayor*)
El caso es, me he releido tu fanfic entero,porque evidentemente despues de casi dos años no me acuerdo...
Bueno,que este pedazo de capitulo,mezclado con la sorpresa de habermelo encontrado, y la añoranza de leer nuestros comentarios,me ha hecho llorar
pero no mucho,no te emociones (?)*ha estado un buen rato llorando*
bueno,despues de este comentario mas largo que la constitucion y mis sentimientos de llorona tras ver siempre a tu lado hachiko hace unas horas...te digo GRACIAS, por este pedazo de fanfic, de los mejores de ljdh he de decir,y los buenos tiempos que pase en internet olvidandome del mundo real,que es una mierda
Petons de maduixa
Shoppo
pd:con tanto mensaje ñoño parezco mi tia paqui. me he convertido en una ñoña,joe
Dios,como deseo que sigas mirando el puto blog para que leas mi comentario.
ResponderEliminarMe doleria que creyeras que te he abandonado TwT
Bueno,que soy mas pesada que una vaca en brazos.
¡¡¡Hostiiiiiii tuuuuuuu!!!
EliminarQue sorpresa me he llevado al ver tu comentario después de tantísimo tiempo que no me pasaba por aquí. Los estudios y el trabajo no me dejan mucho tiempo para esto, pero hoy me ha dado un nosequé y he entrado a mirar y ¡PAM! me encuentro con tu comentario. Me ha alegrado la tarde, que lo sepas.
Jodo, ¡cuánto tiempo! Tienes ya casi diecisiete y yo casi veinticinco… cómo pasa el tiempo, collons!
Me alegro mucho de que te gustara mi fanfic y los comentarios loquers que nos escribíamos (a mí también me hacían mucha gracia) pero la que tiene que dar las GRACIAS, así, en mayúsculas soy yo. GRACIAS por seguirme mientras andaba por aquí. No sé si algún día lo retomaré, pero aquí queda hasta que nos olvidemos de él.
Pd: Creo que después de tanto tiempo escribiéndonos por aquí, todas hicimos amistad (aunque lo pongas en duda en tu comentario. Véase: esa yo de 14 años petarda y con aires de madura, como te podía caer bien? supongo que internet engaña xD) y al ir dejando el blog un poco de lado para atender otras cosas todas nos abandonamos un poquito las unas a las otras, pero jamás os podría reprochar eso a ninguna. Así que don’t worry, Shoppo.
Pd2: Si algún día quieres hablar o lo quesea, búscame en Facebook Nerea J Jett.
Ya te he agregado en fb, aunque te lo encontrarás petado de fotos chorra que spamea mi tío xD ya no uso fb ni practicamente ninguna red social excepto youtube, pero de vez en cuando me conectare y si te pillo conectada hablamos ^^
EliminarY no te preocupes por lo d econtinuar el blog, evidentemente me encantaría que siguieras con él pero se entiende que no puedas. Yo ahora mismo estoy en el curso más decisivo de mi vida(2º de bachillerato) y apenas tengo tiempo, por eso me he quitado de twitter y ya no uso fb jajaja así evito tentaciones
Bueno, un besazo desde madrid y espero que sigamos en contacto :D